La temática está bastante bien, la atención muy bien por parte del personal y el tiempo de espera fue cordial. El lugar estaba bastante limpio al igual que las mesas y el baño todo bien, la ubicación bastante bien. En cuanto la comida estuvo rica sin embargo esperábamos mejor sabor, por el precio preferiría otro lado. Regresaría si no se hay a dónde más ir. Si eres fanático de la salsa búfalo la hamburguesa de búfalo te va a gustar mucho, en lo personal estaba muy condimentada pero es parte de la salsa, también hay otros tipos de comida como cremas, y ensaladas.

Si vienes a la isla, tienes esta deliciosa opción que -obviamente- si eres meat lover, te va a encantar. En el pecado está la penitencia o mejor dicho, a donde fueres, has lo que vieres, y lo que obligatoriamente mi cerebro pedía, eran costillas y así fueron las dos veces que vine en este verano. Tienen buen control de calidad, cocción y condimentación, por lo cual, te vas a llevar una experiencia muy buena si decides venir a visitar Texas Ribs, las costillas jugosas, el barbecue suficiente para cuando llegan (en la mesa ponen dos botes de bbq, la tradicional y la de habanero) y si quieres inundarlas con barbecue, es tu decisión. Pedimos una sopa del día, fideos con trocitos de carne y estaba aceptable, nada extraordinario pero vaya, es una sopa de fideos. También nos tocó probar el chuletón de cerdo y estuvo fantástico, creo que fue el rey de la noche, bien horneada, suave, con la grasa suficiente para convertirse en una de mis favoritas de Texas Ribs. De postre pedimos un 'Suicidio de Chocolate' y está muy rico pero si es para dos o tres personas con ganas de comer mucho chocolate después de una ingesta brutal de triglicéridos, así que claro que vale la pena pero bajo su propio riesgo. El servicio bien, el gerente siempre está al pendiente y por supuesto que regresamos la próxima vez que nos toque estar por allá.