Un lugar encantador y cómodo. La comida es deliciosa, el pan espectacular y los jugos inigualables. El servicio es de 10, teniendo en cuenta su bella galería de cuadros. Solo un pequeño detalle, pago con efectivo.
Esta pasteleria-cafetería es sencillamente deliciosa.
Le doy 4 estrellas puesto que me encantaron sus pasteles, bebidas y otros platillos, pero el servicio es su talón de Áquiles, de verdad es malo, se olvidan de lo que pides, tardan muchismo tiempo en darte la cuenta.
Si estás de visita en San Miguel de Allende, te recomiendo tomar una bebida aquí y probar sus deliciosos pasteles en particular el de chocolate y el selva negra son fantásticos.
El café delicioso al igual que los jugos que ofrecen y acompañados con una pieza de pan o rebanada de pastel son ideales para iniciar tu día.
La atención es excelente y el lugar, como todo el centro, guarda ese estilo de San Miguel.
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