La fusión de elementos locales y oaxaqueños hacen que la experiencia visual del lugar sea única, la atención al principio fue desatendida pero rápidamente mejoró ordenamos unas enmoladas de pollo acompañados de arroz, queso y una arrachera marinada con queso, arroz y espárragos que estuvieron sumamente deliciosos. Nos sorprendió el gran sabor de la comida que para ser honestos, considero que es de los mejores en la ciudad. Estoy ansioso por volver al lugar y disfrutar de las demás opciones qué hay en el menú. El único detalle son los baños, muy pequeños y no tienen extractores por lo que puede llegar a ser una experiencia no grata.
El mole rojo está execelente. Pedimos 2 platos para degustar y es lo mejor que he probado. El servicio está execelente. Atentos y rápidos, la decoración del lugar muy especial.
Me pedí un negroni muy rico
Los postes serán para la próxima vez que regrese
La comida es deliciosa, como si estuvieras realmente en Oaxaca. Tienes que probar el mole, es delicioso. La tlayuda me encantó. Creo que estaría bien unas buenas salsas, solo me sirvieron una roja. Me encantó Juan Gabriel de fondo 😁.
Lo recomiendo a personas amantes del mole 🤤 las enmoladas de requesón están lo máximo.
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